Vitalidad, relax y naturaleza se fusionan armónicamente en la nueva propuesta cromática presentada por los diseñadores que marcan tendencia para la próxima temporada Primavera-Verano 2017. Los colores de moda se inspiran en la naturaleza proponiendo una paleta cromática que va desde tonos vivos y brillantes hasta tonalidades más terrosas.

Colores con gamas de azules liláceos y verdes muy pasteles que evocan a las aguas cristalinas de una isla paradisíaca y que dan sensación de frescura invitando a relajarse.

Las gamas de los amarillos intensos y ocres, tejas y terracotas y arenas que representan la energía del sol, las arenas del desierto y las tierras más secas y que transmiten sensación de calor.

Los rojos que recuerdan la calidez de una llama, un color vivaz que irradia energía y pasión. También los rojos fresas, vendrán muy fuertes esta temporada.

El Naranja intenso. El color mandarina. Es una de las tonalidades más atrevidas de esta propuesta cromática.

Azul profundo. Los diseñadores se inspiran en la mejor de las noches estrelladas de verano. Tiene un poder relajante profundo.

Un tono de rosa muy pálido, muy sutil y suave, un romántico rosa palo, un color inocente y puro que resulta muy sofisticado.

Un verde ácido con un aire muy refrescante símbolo de la fertilidad de la naturaleza. Es un verde claro y brillante que da sensación de frescura.

El aguamarina en su faceta intensa y pastel. Es un color inspirado en la naturaleza de las costas del Mediterráneo. Es un color profundo pero muy claro.

Tropical y festivo, el púrpura es un tono caprichoso que tienta y seduce. Es el color de las flores más bonitas, un femenino y muy intenso tono que estimula los sentidos.

Kale es un verde que evoca un estilo de vida saludable dando sensación de libertad, inspirado en la naturaleza más salvaje.

Color Hazelnut. Tal como indica su nombre es el color de las avellanas y es un color cálido y acogedor, un tono a usar en las combinaciones cromáticas.
        

Color chocolate. El color más dulce y fácil de combinar. Evoca lo étnico, muy de moda todavía como en las temporadas anteriores.

Color granate-liláceo. En gama oscura y más clara. Inspirados sin duda en las frutas más ricas de la temporada. Las cerezas y los higos. Verano en estado puro.

El gris amarronado. En la gama un poco fuerte.

Todos ellos combinados con el nude, un blanco roto, el color más natural de toda la temporada.